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La búsqueda incansable de Pablo Correas de Melo por su hija Candela

Pablo Correas de Melo, papá de Candela, desaparecida el 3 de febrero de 2018 muy cerca de su domicilio en la localidad de San Vicente, visitó Radio Lateral para hablar de la búsqueda que jamás declinó. A pesar del millón de pistas falsas, a pesar del dolor por la ausencia ininterrumpida durante estos 6 años y 200 días de Candela, Pablo continúa buscándola. Un relato conmovedor y urgente para una sociedad que puede lograr lo que no han logrado ninguno de los organismos competentes, encontrarla. Pablo sigue luchando para que la causa pase al fuero federal y sea caratulada como “Trata de personas”.

Una historia de lucha y esperanza

La desaparición de personas es un tema que trasciende las fronteras y afecta a numerosas familias en todo el mundo. En Argentina, el caso de Candela Correas de Melo, quien desapareció el 3 de febrero de 2018, ha resonado profundamente en la comunidad. Su padre, Pablo Correas de Melo, se ha convertido en un símbolo de la lucha por la justicia y la esperanza de que su hija esté viva. Esta es la historia de su búsqueda incansable.

El inicio de una pesadilla

La historia comienza en San Vicente, donde Candela, de solo 15 años, desapareció un día sin dejar rastro. Su madre reportó su ausencia tras no regresar a casa, y desde entonces, la vida de la familia Correas de Melo ha estado marcada por la incertidumbre y el dolor. Pablo, supo de la desaparición mientras se encontraba en Buenos Aires y, sin dudarlo, se trasladó a San Vicente para apoyar la búsqueda. Sin embargo, este viaje estuvo lleno de obstáculos que solo intensificaron su desesperación.

La complicidad de la justicia

Desde un principio, el principal sospechoso fue el novio de Candela, Carlos da Silva, quien fue detenido y liberado en varias ocasiones. A pesar de la evidente tensión en la relación y la falta de pruebas concluyentes, la justicia no avanzó de manera efectiva. La utilización de perros de rastreo no trajo resultados significativos, aumentando la frustración de la familia. Las declaraciones de testigos se convirtieron en un rompecabezas confuso, con inconsistencias que complicaron la investigación.

Luchando contra la burocracia

A medida que pasaron los años, Pablo empezó a buscar cambios en la carátula de la investigación, deseando que la desaparición de su hija se reconociera como un caso de desaparición forzosa o de trata de personas. No solo buscaba justicia para su hija, sino también para visibilizar la problemática de las desapariciones en el país. A pesar de su constante comunicación con organizaciones que apoyan a las víctimas de trata, la respuesta del gobierno fue, en muchos casos, ausente.

El costo emocional y práctico de la búsqueda

La falta de comunicación con el gobierno ha sido un obstáculo constante para Pablo en su búsqueda. A pesar de sus múltiples esfuerzos por obtener información sobre su caso, se ha encontrado con la burocracia y la desidia. La presión emocional se intensificó por las dificultades económicas y el riesgo de movilizarse hacia lugares peligrosos en su búsqueda, evidenciando la desesperación y la determinación que siente como padre.

Un llamado a la acción y la solidaridad

Pablo no solo clama por respuestas para su hija, sino también por una mayor atención y acción del gobierno. Su lucha ha ganado visibilidad, y ha tocado los corazones de muchos en la comunidad, quienes se han unido para hacer frente a esta problemática. Su testimonio destaca la importancia del apoyo y la comprensión en momentos de crisis, recordando que la desaparición de una persona no solo afecta a la familia, sino a toda la sociedad.

Conclusión: La necesidad de un cambio

La historia de Pablo y Candela es un recordatorio doloroso de la situación que enfrentan muchas familias en busca de sus seres queridos. Es crucial que el gobierno y las autoridades tomen acción en la lucha contra las desapariciones y la trata de personas. La esperanza de que Candela esté viva sigue viva en el corazón de su padre, quien a pesar de todos los obstáculos, continúa su búsqueda incansable por verdad y justicia. La comunidad debe unirse para apoyar a aquellos que luchan y para que nunca se olvide el nombre de Candela Correas de Melo.

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