Hay un radar británico operando en Argentina contra Argentina
Luciano Moreno Calderón, es un reconocido escritor e investigador de Tierra del Fuego. En diálogo con CFK en Radio Lateral, explicó la gravedad que reviste la instalación de un radar militar en su provincia, por solicitud de la OTAN y por complicidad de funcionarios argentinos hace ya más de un año. Moreno Calderón apuntó contra el gobernador Gustavo Melella, pero también contra la acción incomprensible de Gustavo López al frente del ENACOM en 2022/2023. Además, calificó de peligroso el escenario geopolítico en el que está inmerso nuestro país en cuanto a las amenazas de la Federación Rusa, que no dudará en atacar objetivos militares en cualquier parte del mundo si el Reino Unido continúa pertrechando de armas a Ucrania.
Radar en Tierra del Fuego: ¿Un instrumento de control o una amenaza a la soberanía argentina?
La instalación de un radar en Tierra del Fuego, Argentina, ha generado un intenso debate sobre seguridad nacional, intereses geopolíticos y la soberanía del país. Presentado inicialmente como una herramienta para monitorear desechos espaciales, este radar ha sido objeto de múltiples críticas y preocupaciones, especialmente debido a su ubicación estratégica cerca de las Islas Malvinas. En este artículo, exploraremos las implicaciones de esta instalación y lo que significa para Argentina y la comunidad internacional.
El origen del radar
En marzo de 2023, se completó la instalación de un radar en la región de Tierra del Fuego. A primera vista, la iniciativa fue presentada como un avance tecnológico para monitorear desechos espaciales. Sin embargo, a medida que se fueron revelando detalles, se descubrió que el radar tiene un uso militar dual y una capacidad notable para detectar actividad en órbita baja terrestre. Esta versatilidad plantea interrogantes sobre los verdaderos fines de su implementación y el contexto geopolítico que la rodea.
Un diseño estratégico
La ubicación del radar, en proximidad a las Islas Malvinas, suscita preocupaciones que trascienden el ámbito técnico. Históricamente, este archipiélago ha sido motivo de disputa entre Argentina y el Reino Unido, y la instalación del radar podría interpretarse como una medida que favorece a intereses británicos y de la OTAN en una región marcada por la tensión. Funcionarios de alto rango fueron los facilitadores clave de este proyecto, lo que intensifica las dudas sobre la transparencia del mismo y su impacto en la defensa nacional argentina.
Ámbito internacional
El revuelo generado por la instalación del radar no ha pasado desapercibido para Moreno Calderón en relación con la política exterior. Rusia, entre otros países, podrían ver como un objetivo militar la presencia de esta tecnología en el atlántico sur y podría meter a la Argentina en un conflicto internacional. Para el especialista, Rusia, por la ubicación del radar y la complicidad británica en acciones militares contra su país, podría desencadenar una serie de reacciones en cadena, alterando el equilibrio de poder en nuestra región e influyendo directamente en las dinámicas de seguridad interior argentina.
¿Hacia dónde nos dirigimos?
La existencia del radar en Tierra del Fuego destaca la complejidad de las relaciones internacionales y la intersección de intereses locales, nacionales e internacionales. A pesar de los llamados a su desmantelamiento, el radar sigue operativo, lo que refleja no solo una decisión técnica, sino una serie de apuestas políticas de gran envergadura. Los ciudadanos argentinos deben estar alertas ante las implicaciones que este desarrollo tiene sobre su soberanía y su seguridad. En un mundo donde la geopolítica se redefine constantemente, el caso del radar en Tierra del Fuego permanece como un recordatorio de la necesidad de vigilancia y entendimiento en el ámbito de la seguridad nacional.